Nunca te calles un te quiero que te sale del corazón.

Yo... Yo estoy vacía por dentro. En vez de 'click' ahora he hecho 'crack' y me he roto en mil pedacitos. Juro que no aguanto más, que no puedo ni mantenerme de pie. Que las copas de más son por vicio, y ya no por placer. Ayer le vi... Se le ve bien, sin echar a nadie de menos. El shock fue por dentro, y enserio que no hay nada peor que eso. Me duele todo, hasta los dedos de las manos de escribir. He jugado tanto con fuego que me he acabado quemando, y he callado tanto ese te quiero que ahora me come por dentro. Me silencié, por hacerlo bien, porque no hubiese final repentino, y busqué otras salidas. Al final, todo lo que es matarme por dentro acaba contigo, y yo me he matado a mí misma. Y no sé que hacer. No estoy sola pero siento... Siento soledad. Blanco y en botella Malibú, siento decirlo pero no me veo capaz de afrontar todo esto. Es demasiado, es mucho peso y mis hombros no lo soportan ya. No sé a cuánta gente he fallado o decepcionado en los últimos meses, no sé cuántos rasguños llevo encima pero de verdad que necesito ayuda. Desesperadamente además. Alguien que sepa que miento porfavor, que me mire a los ojos y me abrace para que llore a gusto. Necesito que alguien me saque de aquí, que me caigo, que este pozo es muy profundo ya para mí. Necesito que me levanten y me lleven, aunque sea a rastras, a la posición inicial. Preveo un año muy duro y tengo pocas fuerzas para echarle cara, preveo muchas lágrimas y no solo las que ya tengo haciendo cascada dentro de mi. Nunca fui un libro abierto, porque no hay quién me anticipe, pero... pero echo de menos lo que era su nada, que era mi todo. Ahora soy la mitad de todo, que viene a ser nada. Soy un café sin leche, una cama sin almohada y un piti sin mechero. Me he vuelto chustera y ahora me fumo hasta las letras, a ver si así acaba antes toda esta mierda y me voy a dónde sea que te vayas cuándo ya no quedan más sitios para ti. Necesito ayuda, urgente, porfavor, que ese te quiero que nunca dije me está comprimiendo y me mata por dentro; que de fé pasé a ser cascada y me hallo cerca del abismo. Que ni siquiera escribir y llorar me ayudan. Que no estoy sola, pero tampoco acompañada. Maldito doce de Mayo y ese Vodka con limón de garrafón, que ahora quién me sacó de la mierda me ha hecho hundirme hasta abajo, y, ¿Sabéis lo peor? Que esta vez sí, si que ha sido mi culpa.