El contador en un principio fue cero.
Me he dado cuente de que en el fondo no he cambiado tanto, tal vez un poco en gustos, preferencias que han ido rotando; en fin, lo de siempre que nos da por recordar.
Sin embargo, las canciones que me recordaban a alguien siguen recordándome a las mismas personas, hay fechas que nunca cambiarán, las rutinas se alteran poco, simplemente se mejoran; que los días siguen siendo días con sol y que las noches siguen teniendo luna, aunque a veces cambie su forma. Que seguimos teniendo veinticuatro horas justas para sacarnos una sonrisa por día, que cuándo juega la selección todos seguimos siendo uno, que por muchos grupos nuevos que haya hay clásicos que son insustituibles, que en verano hace calor, en invierno frío, en septiembre estamos asqueados por despedir a la playa y entrar en las clases y que en primavera sigue alterando la sangre y sigue siendo la estación del amor; y sobre todo, algo que nunca cambiará esque, por muchas veces que vea Grease nunca me cansaré de verla.
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