and through the smokescreen of the crowed restaurants;
Era una noche estrellada, al menos, en algún lugar del mundo lo era. Es curiosa esta forma que tiene el universo de juntarnos y separarnos a su antojo, siendo inexorable su fuerza y su firmeza. Es curiosa la impotencia que puede sentir uno si se para a pensarlo detenidamente. Supongo que esa es una de las razones por las que la gente prefiere no pensar mucho las cosas. Por eso, en ciertos momentos de la vida, no quieres pensar en el futuro, ni en las consecuencias ni en qué pasará ni en qué hubiese pasado. Y otro trago de cerveza. Me preguntaba si podría encontrar continentes en la espuma de ésta o si eso sólo funcionaba en el café. Podrían ser las seis de la mañana y yo seguiría sin saber si aquel día era lunes o domingo. Hay veces que el tiempo pasa muy despacio y lo único que quieres es que el mundo haya cambiado a la mañana siguiente. También, en ocasiones, desearías parar el reloj de un puñetazo. Volar unos segundos en un limbo temporal, cómo si ese tiempo no contase y